Sin embargo, muchas de estas plantas, como por ejemplo la soja, son fitoestrogénicas, que son muy favorables para las mujeres pero cuya ingesta diaria, que pueden tener el efecto contrario y actuar como anticonceptivo.
La información de la red es vaga, muy basada en los usos tradicionales y poco en los estudios reales. Además, cada vez se puede fiar menos de los comentarios de los foros y redes sociales ya que muchos vendedores de estos productos entran en los foros como consumidores e indican que ellos tomaron el producto y que consiguieron resultados.
La mejor forma de optar por una planta en suplemento o en infusiones con el objeto de mejorar la fertilidad, consiste en consultar personas especializadas en este tema para estar seguros de estar tomando el suplemento adecuadamente.
¿Qué podemos tomar sin riesgo?
Nuestro sistema hormonal necesita un estado óptimo para su correcto funcionamiento. Por ese motivo, una nutrición de alta calidad, rica en antioxidantes, vitaminas (especialmente vitamina E) y ácidos grasos, fortalece el sistema reproductor. Muchos suplementos de omega 3 o combinados de omega 3,6,9 sueñen añadir vitamina E, por lo que pueden ser una buena ayuda para mejorar la fertilidad. Si combinamos con antioxidantes como resveratrol o licopeno, estaremos mejorando la calidad del óvulo y los espermatozoides y por tanto, contribuimos a un desarrollo más eficaz del embrión reduciendo las posibilidades de pérdida.Por otro lado, un hígado y riñones cuidados también ayuda a un mejor estado de la salud del sistema reproductor por lo que plantas y suplementos detox son buenas ayudas pero no conviene abusar de ellas.
Además, mantener el sistema inmunitario es vital para conseguir el éxito ya que existen virus que pueden dañar óvulos y embriones. Plantas y suplementos de ajo, propóleo o adaptógenos son una buen ayuda, siempre y cuándo estos adaptógenos no sean fitoestrogénicos (un ejemplo es el reishi).
